Subsidiar la tortilla mediante un esquema de vales o tarjetas como lo fueron en su momento los “tortibonos”, sería una buena estrategia para proteger a los que menos tienen del aumento de la tortilla que continuará debido al encarecimiento constante de los insumos empleados para su producción.
Así lo señaló en entrevista para El Sol de Hidalgo, el presidente de Cámara Nacional de la Industria de Producción de Masa y Tortilla en Hidalgo, Martín Martínez Destunis, quien precisó que pronto concluirá la trilla del maíz, lo cual “meterá” más presión su precio.
De esta forma, estimó, el kilogramo de este alimento terminará costando entre 20 y 22 pesos, lo cual, recordó, dependerá de los costos de producción de cada industrial. Otorgar vales o tarjetas para acceder a este alimento, permitiría que los sectores que puedan pagarla al costo que marque el mercado, sin afectar a los sectores vulnerables, indicó.
Cabe recordar que fue en la década de los ochenta cuando se repartían los llamados tortibonos, mientras que para los noventa, este esquema operaba mediante una tarjeta con una cinta magnética. En ambos casos, se hacían efectivos para el canje de tortillas directo en los establecimientos.
“Si el gobierno no va a meter las manos para que los insumos dejen de subir, subsidiar la tortilla sería una buena alternativa para que la gente tenga tortilla gratis y que a nosotros no la pague”, recalcó.
A inicios de este mes, la tortilla registró un incremento de mil 550 pesos por tonelada, lo cual incrementó en 1.40 pesos el costo de producir un kilo de tortilla. Como efecto inmediato, el alimento subió de un precio promedio de 17 pesos hasta los 18 y 19 pesos según el sitio de compra. Esta tendencia, de acuerdo con el dirigente se mantendrá.
Por otra parte, Martín Martínez Destunis recordó que el precio de la tortilla está liberado, por lo cual los productores estarían en libertad de venderlo al precio que marquen sus costos de producción, por ello consideró injusto que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) llamé a la población a denunciar aumentos de precio cuando en realidad no existiría fundamente para hacerlo.
Lo que si deben ser denunciados, abundó el líder gremial, son aquellas locales que expenden kilos incompletos.
“Al gobierno actual quizá no le guste el nombre de tortibonos debido a que era un nombre que estos apoyos tenían durante los gobiernos neoliberales, que le ponga como quiera, pero dar estos apoyos realmente beneficiaría a la población de más bajos ingresos”, comentó.