SAN SALVADOR, Hgo.- Un grupo de vecinos de El Pacheco protestaron contra los dos topes que fueron colocados en el territorio de la comunidad de Casa Grande al argumentar que son un peligro para los automovilistas.
Desde temprana hora ayer llegaron personas inconformes hasta donde están los topes con la intención de derrumbarlos.
Minutos después se presentó el secretario general municipal, Casimiro Pérez López, con el objetivo de dialogar la situación y llegar a acuerdos a fin de evitar una confrontación entre ambas comunidades.
Al cierre de edición, aún no había convenio que atendiera la demanda de los inconformes.
De acuerdo con información oficial, pobladores de Casa Grande recurrieron a su vecino y presidente municipal, Armando Azpeitia, para gestionar acciones que permitieran reducir la velocidad de los vehículos.
Indicaron que en repetidas ocasiones se han registrado accidentes automovilísticos en el tramo carretero que cruza por este poblado a falta de reductores de aceleración.
Por ello, la alcaldía emitió la autorización para la construcción de dos topes con su respetiva señalización, dentro del territorio comunitario de Casa Grande.