En el marco del periodo de Cuaresma, la Arquidiócesis Primada de México, recuerda a los feligreses, las tentaciones que tuvo que pasar Jesús en el desierto, con la finalidad de alentarlos en este periodo litúrgico.
Durante este tiempo, la ciudadanía practicante de la religión católica, realiza diversas acciones ante la llegada de la Pascua, como el ayuno y la abstinencia, que sirven de preparación para la renovación hacia una mejor vida y se aleja de ciertos hábitos como penitencia para el perdón de sus pecados.
Por ello, la iglesia rememoró las tres pruebas que pasó Jesús al aislarse durante 40 días en el desierto, como convertir las piedras en pan, incitarlo a aventarse de la parte más alta del templo o convencerlo de ser dueño de montes y reinos:
“Es normal en la vida de todo ser humano estar sujeto a tentaciones, por tanto, el pasaje de las tentaciones de Jesús, pueden servirnos como una muestra de aquello que debió superar el Señora lo largo de toda su vida”, publicó la Arquidiócesis desde redes sociales.
La tentación es una prueba que mide las acciones de las personas y su capacidad para elegir entre el bien y el mal, por lo que en este periodo de transformación es común que los feligreses sean tentados a cometer actos desagradables a los ojos de Dios.