Los bufónidos son una familia de anfibios anuros con aproximadamente 80 géneros y 750 especies actuales; es la familia más numerosa de anfibios. Muchas de sus especies se conocen con el nombre común de sapos; no obstante, numerosas especies pertenecientes a otras familias también son comúnmente denominados sapos.
Estos animales son definidos como Anfibio anuro de cuerpo rechoncho y robusto, ojos saltones, extremidades cortas y piel de aspecto verrugoso. En el Valle del Mezquital los locales los conocen como T’iue.
Según el historiador local Juan Carlos Martínez, el día o festejo de San Francisco de Asís salen los sapos de la tierra a comer insectos, esta es una leyenda en las comunidades del Valle del Mezquital que cuentan los xitas –abuelitos – a los sus nietos.
San Francisco de Asís, es reconocido en la fe católica como el Santo de los animales, debido a que durante su vida decidió vivir sin lujos ni posesiones, se le reconoce por su conexión con la naturaleza y su respeto por todas las especies
En días posteriores a la llegada de la temporada de lluvias, los habitantes de esta región reportaron el avistamiento de T’iue – sapos en lengua materna el Hñahñu - , los cuales son de color negro con manchas café.
“De repente comenzamos a escuchar el ladrido de los perros, y como no vimos a nadie pensamos que alguien pasó corriendo por la carretera, pero los perros no se callaban, entonces nos acercamos y vimos a los T’iue en el pasto”, aseguró Martina Ortiz, quien narró esta episodio en su lengua materna.
Según Juan Carlos Martínez, estos anfibios se esconden en la tierra donde adoptan una estado de hibernación o animación suspendida, en tiempos de sequía, y cuando llegan la temporada de lluvias vuelven a salir a la superficie