Con la bendición de las palmas se inicia la Semana Santa en la iglesia católica, tiempo de reflexión espiritual, indicó Monseñor Domingo Díaz Martínez, arzobispo de la Arquidiócesis de Tulancingo.
“Esta Semana Santa es un tiempo de oración, reflexión, de descanso y de encuentro con el Señor”, indicó.
Detalló que para el martes se ofrecerá la misa crismal en la Catedral de Tulancingo, en punto de las doce de medio día, a la que acudirán tres laicos de cada parroquia y los sacerdotes de la diócesis, es la celebración en la que se consagra el Santo Crisma y bendice además los restantes óleos o aceites.
Informó que para el día miércoles 13 de abril en todas las parroquias se hará la celebración para ungir a los enfermos, mientras que el día Jueves Santos, se llevará a cabo la celebración de la Última Cena y el lavatorio de pies.
“En donde se recuerda que hemos recibido un mandamiento, vamos a recalcar que los mandamientos hay que observarlos y obedecerlos, la realidad que estamos viviendo de robos, de mentiras y de violencia, implica que hemos olvidado los mandamientos que Dios nos ha dado”, lamentó.
El Viernes Santo, informó que se celebrará el Viacrucis, por lo tanto dijo que recomendaron a los sacerdotes realizarlos al aire libre a efecto de cuidar la salud de los presentes, incluso les sugirió que en caso de haya mucha afluencia de personas que hagan dos o más Viacrucis.