La central de abastos en Tulancingo luce con banquetas libres, sin vendedores ambulantes ni “gritones” posterior a los primeros días del acuerdo establecido con la presidencia municipal.
En los principales accesos al sitio comercial, fueron colocadas barreras metálicas a fin de evitar que vendedores informales se coloquen en el sitio.
“Estamos viendo cómo funciona lo de las rejas, las banquetas están más libres y el lugar más limpio”, dijo Adolfo Hernández, tesorero del PIFSAL.
Después de que comerciantes establecidos de este centro de abasto se manifestaran en contra del ambulantaje los días lunes y martes de esta semana bloqueando el bulevar desde el puente de La Morena hasta Corregidora.
En mesa de trabajo entre los representantes del centro de abastos y el municipio, acordaron la entrega de la regularización de todo el comercio informal y el retiro del bloqueo.
En ese sitio se puede observar el patrullaje de elementos de Seguridad Pública en la zona y mayor capacidad de tránsito de usuarios sobre las banquetas.
Se espera que esto se mantenga y que la regularización del comercio informal se inicie, luego de que sea aprobado el reglamento para ordenamiento al comercio en vía pública que fuera anunciado por el municipio.