En la región de la Sierra Gorda, utilizan camionetas de redilas para poder transportar a los usuarios, quienes pagan hasta cincuenta pesos por cada viaje, dependiendo de la ruta o tiempo de traslado.
Según los transportistas, hay un aproximado de 45 unidades concesionarias en este municipio, y los taxis piratas sobrepasan los regularizados, son más piratas que concesionarios.
“Son 48 a 52 los taxis piratas de Santa Ana, Chapulhuacán y las camionetas piratas de todo el municipio”, expusieron los concesionarios del autotransporte.
En el municipio de Chapulhuacán, en la región de la Sierra, permisionarios del autotransporte de pasajeros, expusieron que los visitadores o funcionarios de la Secretaría de Movilidad y Transporte de Hidalgo, no han realizado su trabajo de supervisar las unidades concesionadas.
Erick, taxista de esta localidad expuso en entrevista “A nosotros nos obligaron a regularizarnos, pagamos por una concesión para que pudiéramos trabajar de manera legal”.
El permisionario del transporte público explicó “Cuando compramos la concesión, en gobierno nos explicaron que se realizan visitas de supervisión periódicas para detectar a los taxis piratas”.
“Sin embargo desde ese entonces los supervisores no han venido a Chapulhuacán, por lo que los taxis chocolates han proliferado, situación que nos tiene preocupados, porque trabajan fuera de la ley”, dijo.
Además aseguró “En el centro de Chapulhuacán llevan personas para las comunidades, sin un seguro de vida, lo que pone en riesgo a los pasajeros, además sus unidades son de muchos años atrás, y a los permisionarios no piden vehículos nuevos”.