Un grupo de taxistas de las bases del centro de Tula irrumpieron en la sesión de cabildo para exigir se atienda la problemática de invasión se sus rutas por parte de taxis irregulares, que se generó en la presente administración, hace casi tres años.
Los taxistas, que se sienten ignorados por las autoridades, aseguraron que han intentado ser atendidos por el responsable de la Secretaría de Seguridad Pública de Tula, pero este no les ha hecho caso, aduciendo que "no le han dado la orden" de sacar de circulación a los taxis irregulares.
También denunciaron que no han sido atendidos por el regidor Ángel Lugo, presidente de la comisión de Seguridad Pública y Tránsito, y que el alcalde Francisco Guzmán no ha tenido disponibilidad para recibirlos.
Finalmente, al término de la sesión, fueron atendidos de manera privada por el alcalde y una comisión, y la alcaldía se comprometió a solicitar a la Secretaría de Movilidad que atienda las denuncias del gremio.
Los taxistas, señalaron que esperan que esta vez se tomen medidas efectivas para resolver el problema y proteger sus rutas.