El tradicional jueves de plaza municipal, es considerado como una gran fuente de ingresos, según vendedores ambulantes de otras localidades.
“Toda la semana me la paso haciendo mis artesanías para poder venir a venderlas y sacar un poco de dinero, porque es de los pocos lugares donde la gente aún compra, no sé si lo hacen para apoyar a los que venimos de fuera o porque les gustan los productos de otras comunidades, más que nada porque son trabajos artesanales” Eufigio Perez, vendedor ambulante, originario de la comunidad de Tlamaya.
El señor Eufigio y el grupo de personas con el que acude a vender sus artesanías y distintos productos que ofertan a la población Tulancinguense, asegura que ante la crisis económica que se vive actualmente por la pandemia del COVID-19, han encontrado en Tulancingo una buena fuente de ingresos y fácil movilidad de sus productos.
Guadalupe Hernández, perteneciente de la misma comunidad, añade que, la ciudad es pequeña, y sí no logran vender todos sus productos, han encontrado distintos comerciantes como ellos, con los que han acordado un tipo de trueque entre sus mercancías y de esta manera, pueden llevar un poco de comida o recaudo a sus casas.