Aproximadamente de 300 a 350 talleres de fabricación de ataúdes en Tlaxcoapan, lo que representa que es la principal fuente de empleo para muchos pobladores, y con esta labor se posiciona el municipio dentro de los primeros lugares en producción a nivel nacional al igual que Guadalajara.
Pedro Serrano Vargas quien es fabricante de este tipo de artículos fúnebres, mencionó al respecto que ataúdes de esta región de Hidalgo se han exportado a otros países como Estados Unidos de Norteamérica y en Europa y Centroamérica y decenas de habitantes dependen económicamente de esta singular actividad.
Recordó que durante la pandemia por Covid-19 aumentó la demanda de ataúdes del 800 al mil por ciento, los cuales eran solicitados en diversos estados de la República Mexicana.
“Yo fabricaba hasta 100 ataúdes a la semana y otros compañeros de 400 a 500 durante esa difícil época. Esta actividad económica es hasta el día de hoy la principal en Tlaxcoapan y muchas familias dependen de ella”, indicó el entrevistado.
Dio a conocer que en la actualidad él y sus compañeros de labores fabrican de 10 a 15 ataúdes por semana y en otros talleres localizados en la cabecera municipal y en la comunidad Doxey se hacen más artículos de este tipo.
Pedro Serrano explicó que la mayoría de ataúdes se trasladan a la Ciudad de México, Tlaxcala, Querétaro, Guanajuato, Jalisco, Aguascalientes, Zacatecas, Oaxaca e Hidalgo.
Sube precio de materia prima
En cuanto a los costos de la materia prima para la elaboración de los productos fúnebres, dijo, aumentaron en algunos artículos este año.
Entre ellos se encuentran los barnices que antes valían 2 mil 500 pesos la lata de 19 litros y ahora se cotiza en 4 mil pesos, así como los clavos que anteriormente costaba 50 pesos el kilogramo y hoy en día está en 100 pesos el kilogramo y los diferentes tipos de madera incrementaron su precio hasta el 40% y herrajes metálicos hasta el 50% , mientras que las telas y vidrio han mantenido su valor y la hoja de lija antes se encontraba en 12 pesos y ahora de 20 a 25 pesos.
El fabricante precisó también que hay varios modelos de ataúdes entre los que se encuentran los denominados La Cruz, Diamante y Colosio y el material que se ocupa para elaborarlos son comúnmente madera de pino, banac y cedro y algunas veces maderas exóticas como Parota y Palo de Rosa y sus precios son competitivos.
Por último, citó que el término de proceso de fabricación de un ataúd tarda cuatro días, ya que el primero es de carpintería, el segundo es de lijado y fondo, el tercero de acentar y brillo y el cuarto día es para la tapicería.