Luego de una riña ocurrida la tarde del domingo 13 de agosto en pleno centro de la cabecera municipal de Huasca de Ocampo, Primer Pueblo Mágico de México, la cual contó incluso con la intervención de la Policía Estatal y la Guardia Nacional, el alcalde Francisco Mayoral señaló que habrá investigaciones para determinar si hubo abuso policial en la trifulca, toda vez que son cuatro uniformados los que se involucraron en un enfrentamiento con ciudadanos tras detenciones supuestamente mal ejecutadas.
"Los detenidos eran personas reincidentes (...) no permitiremos que se rebase la autoridad pero tampoco permitiremos que haya abusos de autoridad", señaló el munícipe.
¿Qué pasó en Huasca el domingo 13 de agosto?
Según se compartió en redes sociales durante la tarde del domingo, al menos 20 personas acudieron a la comandancia municipal para externar su inconformidad por el trato que recibieron de los referidos oficiales, situación que atendía personalmente el alcalde cuando comenzaron los golpes
El edil precisó que el conflicto en realidad inició el sábado por la tarde, cuando recibieron un reporte del C5 que motivó la detención de una persona que presuntamente en estado de ebriedad, casi atropella a una familia en el centro de Huasca.
En las acciones policiales, tres familiares fueron sometidos por agentes de Seguridad Pública, dado que pretendían por medio de resistencia liberar a su hermano de la detención.
Dentro de la comandancia, familiares incluso habrían intentado huir con el dinero de la multa así como los recibos cuando se liberó al presunto responsable, por lo que inmediatamente fueron detenidos y sometidos por la fuerza.
El alcalde narró que ese mismo día se les liberó luego de que pagaron sus respectivas faltas administrativas.
Sin embargo, el domingo por la tarde regresaron a las instalaciones de Seguridad Pública en compañía de al menos 20 personas, varios de ellos en estado inconveniente, contó el edil. Se inició un diálogo pacífico con los quejosos, quienes argumentaban haber sido víctimas de agresiones y malos tratos por parte de los policías.
En plena conversación y a las afueras de la comandancia, se calentaron los ánimos y se desató una nueva trifulca, en donde cuatro policías y un elemento de Protección Civil fueron golpeados y retenidos por la población. Testigos señalaron que los policías respondieron a las agresiones.
Mayoral entonces salió a "calmar el conflicto" y tras al menos media hora de diálogo y luego de un espectáculo de gritos y chiflidos, las personas se retiraron y liberaron a los elementos retenidos.
Investigarán si hubo abuso policial
Se acordó con ellos en investigar por la vía legal si en efecto dichos uniformados habían ejercido abuso de autoridad sobre los ciudadanos, por lo que "a partir de hoy empieza proceso con Honor y Justicia. Tengo que revisar caso por caso y le daremos salida legal", adelantó.
Por otro lado, se espera que los quejosos acudan de igual forma ante el Ministerio Público o ante la Comisión de Derechos Humanos, pues a consideración del presidente, "hay que propiciar el diálogo". En ese tenor, señaló que por el momento no habrá suspensión para los agentes involucrados hasta que se revisen las circunstancias, sin embargo, reconoció que "debieron retirarse y no haber correspondido, se salió de control".
"Somos un municipio diferente, dependemos de la imagen turística (...) Buscaremos (trabajar) con los mejores elementos, no toleraremos incapacidad", concluyó el alcalde.