El IMCO presentó el Índice de Competitividad Urbana 2021, el cual ubicó a la ciudad de Tula, recientemente siniestrada por el desbordamiento de los ríos Tula y Salado, entre las ciudades con competitividad baja.
El indicador, que mide la capacidad de las urbes para generar, atraer y retener talento e inversiones, reveló que en términos generales las ciudades fueron las más afectadas por la pandemia, toda vez que empeoraron en temas económicos, sociales y educativos.
Cabe recordar que en septiembre pasado, mes en que ocurrió la tragedia en Tula, Rigoberto Aguilar Zavala, vicepresidente de la Canaco en ese municipio señaló que debido a que temen que la ciudad vuelva a inundarse, varios negocios de la región evaluaban irse de la región.
Hasta ahora, la zona no ha podido reponerse por completo de los daños debido a que los apoyos por parte de las autoridades apenas comenzarán a fluir a través de diversos esquemas de créditos, según informó la Secretaría de Desarrollo Económico.
Pese al resultado negativo, Tula, que fue ubicada por el Instituto en el grupo de ciudades con menos de 250 mil habitantes, se ubicó en el sitio cinco con respecto a las otras ciudades de su grupo, sin cambios en comparación con 2020.
A su vez, el reporte emitido por Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) también reveló que Pachuca, la capital del estado, ostenta competitividad media alta dentro del grupo de 250 mil a 500 mil habitantes y subió una posición con respecto a la medición del año pasado.
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El IMCO reveló que entre las ciudades con más de un millón de habitantes, el Valle de México es la más competitiva, seguida por Guadalajara, Querétaro, Monterrey y Mérida. En tanto, de las ciudades de entre 500 mil y un millón de habitantes, las más competitivas son Saltillo, Culiacán, Durango y Mazatlán.
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