En un sondeo realizado por este medio de comunicación, la mayoría de los consultados coinciden en que, un aumento en el costo del pasaje sería justo, solo si las condiciones de las unidades mejoran; aunque, el sector estudiantil refiere que ellos serían los más afectados, pues a diario hacen un gasto importante para acudir a sus clases.
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“Si a las unidades les dan el mantenimiento necesario para que valga la pena el aumento, bienvenido. Ya que la mayoría están muy maltratadas”, señaló el empresario Valentín García Sánchez. Aunque manifestó que el trato de los operadores debe mejorar, porque están prácticamente a un 50-50, algunos buenos y otros malos.
Por su parte, el empresario Adolfo Islas, de 39 años de edad, declaró que sí hace falta el aumento en el pasaje porque todo ha subido de precio. “Refacciones, gasolina y todo eso sube, pero así como se da el aumento deben darle mantenimiento a las micros y capacitación a los choferes”.
En cuanto al trabajo de los operadores señaló: “a veces son medio déspotas o hay algunos que son buena onda, pero la mayoría, a lo que he visto, no tiene cultura vial; se paran donde quieren, aunque no sea exclusivo para paradas, van echando carreras, en fin”, declaró.
“Las unidades físicas están muy mal, no les dan mantenimiento y ese es igual parte del problema que deben de atender, para tener mejor calidad de transporte, donde vaya la gente segura”, manifestó.
El ingeniero Francisco Armando Flores García, de 54 años de edad, dijo que un aumento sería complicado, sobre todo para la economía de los alumnos.
“El índice de deserción más alto es el económico, entonces, el aumento al pasaje sería complicado… por ejemplo, a la universidad (UPT) de repente viene gente de Cuautepec y tiene que tomar dos colectivas, tan solo ahí son 40 pesos diarios, entonces imagínate”.
Dijo que, en general, hay muchas unidades que ya son obsoletas y están muy “traqueteadas”, no solo en Tulancingo, sino también los camiones de las rutas foráneas, como los que van de Tulancingo a Pachuca.
Andrea Luqueño, de 26 años de edad consideró que no sería justo un aumento al pasaje, “a veces pagamos 10 pesos y en ocasiones tienes que ir parada porque los conductores suben a demasiadas personas, precisamente porque no existen los medios de transporte suficientes para llevar a las personas en una unidad”, refirió.
“La mayoría del trato de los operadores es amable, pero en lo personal me han tocado, y comentando entre amigas, algunos acosadores, es un problema muy grande aquí en Tulancingo, con personas que te hablan y te faltan al respeto”.
En cuanto al estado físico de las unidades dijo que en su mayoría es malo, “algunas ya ni cuentan con los pasamanos que sirven para agarrarte como medio de seguridad, así como los asientos que se van moviendo; no todas las rutas cuentan con los medios suficientes dentro de la unidad para que puedan ofrecerte un buen servicio. Si estás pagando por un servicio, considero que debes de recibir buena atención”, concluyó.
“Considero que tal vez no sea necesario porque la economía no da para tanto, pero con ese aumento se comprometen a tener más y mejores unidades, más decentes, pues habríamos que aceptarlos”, dijo Alejandra Soto, de 26 años.
“Muchas unidades están viejas, sucias, algunas ventanas no sirven, las puertas por lo consiguiente, cuando pasas un tope o bache se siente demasiado porque no tienen amortiguadores”, agregó.
“El trato de los operadores de algunos es muy bueno, pero de otros no tanto, sobre todo de los choferes jóvenes que tal vez consideren ese oficio como algo pasajero por lo que además no toman las medidas necesarias para evitar accidentes”.
Aumento en tarifa de transporte público podría mejorar las unidades
Por su parte, Esbeidy Galván, de 21 años de edad dijo estar de acuerdo con el aumento en el pasaje, sobre todo porque las unidades están en malas condiciones y eso podría favorecerlos.
En cuanto al trato de los operadores, dijo que hasta el momento ha tenido malas experiencias.
Karla, de 17 años de edad, también coincidió en que, mientras sea para la mejora de las unidades, el aumento está bien, ya que existen muchas en malas condiciones.
Ester Templos, de 46 años de edad, coincidió que el aumento del pasaje podría favorecer el mantenimiento a las unidades.
En cuanto al trato de los operadores señaló que “hay unos que son malhumorados y avientan las monedas a las adultos mayores”.
Gustavo Amador, estudiante de 23 años de edad, consideró que un aumento en el pasaje pegaría directo a la economía personal, “tan solo en el área de comercio van a subir demasiado los costos de alimentos o necesidades básicas, porque todos ocupan el transporte, ya sea para entregar pedidos u otras necesidades, lo cual generará un incremento en la economía”, aseguró.
Dijo que el trato de los operadores es en su mayoría amable, “hacen su trabajo, aunque hay algunos que son déspotas o no tienen tacto con la gente mayor, eso habla mucho de la persona que esté conduciendo una unidad”.
“Hay algunas unidades que están muy maltratadas, pero en otras se nota que el operador es muy responsable, le mete empeño, es limpio, y creo que eso depende del concesionario y cómo se arregle con el chófer”, concluyó.