Luego de sostener un encuentro con autoridades de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), la doctora Julieta Castelán Cuevas, directora asignada a la Escuela Secundaria General Número 1 de Tulancingo, señaló que no ha sido posible retomar su cargo, por lo que considera que hay una serie de bloqueos burocráticos en su contra. Y es que pese a que las medidas cautelares a su favor que dictó el Órgano de Control de la SEP estipulan que ella debe reincorporarse a dicho plantel y que sus presuntos agresores laborales deben salir, esto no ha ocurrido hasta el día de hoy.
“No han resuelto nada. Lo único que me dijeron es que en lo que terminan la investigación, yo voy a firmar en la jefatura del sector de manera “momentánea”. Querían de alguna forma convencerme de cambiarme de escuela, les dije que claro que no, que yo no tenía porque hacerlo era decir que sí había incurrido en un delito y en realidad todo es por acoso laboral de la supervisora y del delgado sindical”, expresó la doctora.
Por tal motivo, están por cumplirse 20 días desde que Castelán Cuevas no puede retomar sus funciones como directora de la “Uno”, ya que el día acordado para su retorno (el pasado primero de febrero), el delegado sindical presuntamente organizó una protesta en el plantel, hecho tras el cual cerró la escuela y se cancelaron clases. Aunado a ello, la doctora considera que hay un conflicto de intereses asimismo con la Directora de Educación Secundaria, por lo que ya también presentó una denuncia formal ante el Órgano de Control de la SEP, por incurrir en omisiones e irregularidades en el proceso: “denuncié la no aplicación de las medidas de protección y solicité se investigue quién no las aplicó”
“Fue una reunión muy áspera, porque la directora de Secundaria me comentó que la indicación era que firmara en la jefatura y que después me avisarían cuál era mi situación laboral. Por supuesto que me indigné, pretende que en cinco minutos con esa indicación yo ya no haga nada ni pida investigación”, señaló.
En tal sentido, refrendó su llamado para con Said Vargas, líder de Sección del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE); así como para Natividad Castrejón, titular de la SEPH. Insistió en que ante ambos funcionarios ha solicitado audiencias, aunque sin éxito. Cabe recordar que este conflicto inició hace casi tres años, cuando Julieta Castelán salió de la Secundaria Uno para estudiar su doctorado. Desde ese momento, ha sido presunta víctima de calumnias y difamaciones por parte de la supervisora escolar y del delegado sindical asignado a esta escuela.
Además, se suman comentarios y actitudes propias de discriminación por razón de género. Según dijo anteriormente la afectada, el supuesto ejecutor de dichas agresiones ha manifestado en reiteradas ocasiones que “no está de acuerdo en que hayan muchas mujeres encabezando” o “que no está bien que tantas mujeres ocupen puestos directivos”. Por este motivo, al cual se suma la maestra Verónica Alejandra Castelán, a quien por cierto tampoco la dejaron tomar el cargo de subdirectora de la Secundaria Uno pese a que fue asignada directamente por la SEPH, prevén abundar la lucha jurídica con denuncias penales formales.