Rodolfo González es un joven orgullosamente tulancinguense que tras estudiar un posgrado en Alemania escribió un libro para hacer la comparativa entre el sistema penal de Alemania y México.

El joven originario de Tulancingo que es doctor en derecho comenzó a escribir el libro titulado Derecho Proceso Penal Alemán y Mexicano desde el 2019, pero justo por el tema de la pandemia su finalización terminó apenas la semana pasada, es decir su elaboración tardó cuatro años.

“Es la primera obra de derecho penal comparado con los sistemas de Alemania y México. Es una traducción que incluye a 7 países entre ellos Chile, Argentina Perú, Colombia, Costa Rica, España y México”.

Juan Fernando González Espinosa, hermano de Rodolfo y quien también colaboró en la creación del libro explicó que el comparar estos dos proceso permiten darnos cuenta de las diferencias que tenemos ,hacia donde va nuestro país y que tan alejados están unos de otros

“No estamos tan apartados ni hay diferencias tan letras, por ejemplo el concepto de tres jueces en juicio oral se basa en los cinco jueces que utilizan allá. En Alemania hay un corte inquisitivo y en México hay el adversal”.

Al estudiar ambos procesos encontraron que hay muchas figuras comunes pero a la vez diferente lo que permite dar una perspectiva óptima para conocer lo que funcionará o no.

En cuanto a diferencias positivas explicaron que nosotros (mexicanos) tenemos una participación mucho más profunda de las víctimas, y hay figuras que nos ayudan a los procesos… La participación de las víctimas era una deuda histórica que teníamos, las víctimas no se sentían escuchadas y esto es algo que no hay en otros países.

En las diferencias negativas, dijeron que falta mucho por transitar y a su vez perfeccionar “una de las cuestiones es considerar que su proceso consiste en simplemente hacer valer la ley, los proceso se llevan a través de los criterios de los magistrados”.

Respecto a si es sistema alemán pudiera funcionar en México y viceversa dijo que nosotros estamos acostumbrados a que la justicia se da únicamente con la cárcel, pero una reparación también lo puede ser, “soluciones alternas” que usan los alemanes y que difícilmente acepten los mexicanos.