Centenas, tal vez miles de luminarias en desuso, no todas inservibles, se almacenan por montones y apiladas en desorden desde hace tiempo en una de las seis pistas de squash que aloja la Unidad Deportiva de Tulancingo, una de las instalaciones municipales que mayor deterioro presentan luego de que concluyó la administración Márquez-Hernández Apan (2020-2024) y que sigue sin atenderse a más de dos meses que entró en funciones el gobierno de Lorena García Cázares.

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En recorrido por el sitio, El Sol de Tulancingo constató que toda la superficie de la pista es la base de una especie de montón de luminarias, en su mayoría oxidadas o rotas. El espacio es de dos plantas, a manera de que se pueda observar la partida de squash desde una posición superior, sin embargo, al subir al corredor en el segundo piso, las luminarias parece que se salen porque incluso rebasan los niveles de este pasillo de gradas.

“Son incontables. Cuando yo recibí la Unidad Deportiva pues no se podían contar, son incontables (...) en la administración pasada les prestaron ese espacio para guardar las luminarias que se retiraron (...) ya estuvimos en pláticas para que desocupen esas canchas, porque vamos a crear las escuelas deportivas y tienen que quedar vacias para que empiecen a operar en 2025””, sentenció la secretaria de Cultura, Educación, Deporte y Juventud, Guadalupe Rodríguez Uribe.

Por su parte, Juan Alberto Santuario Elías, secretario de Servicios Municipales de Tulancingo, explicó que de las luminarias que se almacenan en la pista de squash se han logrado habilitar 100, las cuales dijo “ya se están instalando. Lo que se logre rescatar se va a rescatar. Todo lo que recabemos vamos a proponer al área de inventarios para que se dé de baja ya y limpiemos, porque son materiales ya inservibles pero tienen un valor económico”

Este no es el único espacio en la sede de squash que se usa como almacén. En la pista contigua, cientos de bicicletas, gran parte ya oxidadas y con notable deterioro, se guardan por montones. Según refirió, estas bicicletas integraron una campaña de Rodadas Ciclistas Culturales.

“Están perfectamente bien inventariadas, sin embargo se dejaron de ocupar, se les dejó de dar mantenimiento. Hay algunas que tendrías que meterle mucho dinero para que volvieran a funcionar y hay algunas que sí (funcionan), que son las que vamos a donar”

Esta iniciativa de recorridos nocturnos se ejecutó en la administración 2016-2020, a cargo de la Secretaria de Desarrollo Humano y Social, dependencia que reportó que fueron 55 rodadas en total que entonces beneficiaron a 3 mil 500 tulancinguenses; hoy muchas de estas bicicletas, todavía contadas en inventario como activo municipal, podrían terminar en la basura.

Al problema del recinto para squash en este complejo deportivo público, se suman las condiciones en las que se encuentra, por ejemplo, el skate park. Lo que otrora prometía ser un polo de desarrollo para esta vertiente del deporte urbano en la ciudad, hoy se convierte -según lo narraron trabajadores de la Unidad- en un punto de reunión para adolescentes que acuden presuntamente a consumir drogas.

El bowl (la parte del parque que parece una pileta) está repleta con agua estancada, basura y presenta fragmentaciones en el pavimento, por lo que de drenarse todo el líquido, ya no podría utilizarse por el riesgo que representa para las acrobacias. Esta parte, según el sitio especializado Skate Factory, es “uno de los módulos más caros y difíciles de construir. También es uno de los módulos más difíciles de usar”

En condiciones similares está la Alberca Semiolímpica, fuera de servicio, al menos, desde el pasado 15 de agosto. Más allá de la falta de mantenimiento y rehabilitación que requieren las áreas de vestidores, gradas y sanitarios, al cuarto de máquinas le urge un rediseño: al estar bajo tierra, se inunda cada vez que llueve en abundancia y eso genera que las bombas se descompongan frecuentemente.

Al respecto, Rodríguez Uribe solicitó a la población mediante un comunicado gubernamental “comprensión y paciencia ante los trabajos que se ejecutan y se fijó el compromiso de darles agilidad reconociendo que para muchos tulancinguenses, la alberca municipal es de gran apoyo para el aprendizaje y práctica de esta rama deportiva, pero también el medio para acceder a terapias de rehabilitación”.

No obstante, el tema presupuestal persiste como principal obstáculo para solventar el abandono de la Unidad Deportiva:

“El presupuesto que está destinado para la Unidad Deportiva no alcanza. Se va a desarrollar un proyecto especial para solicitar el recurso y se pueda rehabilitar (...) toda la Unidad quedaría como con unos 900 mil pesos, para que todo quedara al cien”, concluyó la secretaria.