Nuevamente será el acatlense José Pimentel Rodríguez quien encarne a Jesús de Nazaret en la presentación anual del Viacrucis Viviente de Acatlán, una de las puestas en escena masivas más grandes de la entidad. Para este año, la edición número 33, esperan mantener o romper el récord de asistencia del año anterior, que aproximadamente fue de unas 20 mil personas.
“Me estoy preparando físicamente y psicológicamente, el año pasado fue una gran experiencia, sobre todo espiritual. Siento entusiasmo, pero sobre todo una gran responsabilidad, porque implica muchas cosas. Yo siempre voy al gimnasio, pero ahora es una dieta más rigurosa, entrenamiento más pesado y por supuesto aprenderse los diálogos. En el tema espiritual, el párroco nos echará la mano”, cuenta emocionada.
Y es que para este año, su determinación y preparación física se enmarca bajo un amargo suceso que vivió en junio del año pasado, cuando fue víctima de un atentado a mano armada y de donde salió con una herida de bala en una de sus rodillas. Afortunadamente “y gracias a Dios”, refiere, pudo salir con vida del trágico episodio.
“Este año será más difícil porque sufrí un atentado y recibí un impacto de bala que me atravesó todo el hueso y quedó algo resentida. Ya tuve rehabilitación y va marchando todo bien”, cuenta sobre la complicación que quizá tenga para soportar la cruz de madera que pesa alrededor de 90 kilos, la cual deberá arrastrar en un trayecto de casi tres kilómetros, bajo el sol e intenso calor que caracteriza al municipio.
Hace algunos días arrancaron formalmente las diligencias de organización para este magno evento. El comité organizador del Viacrucis convocó a la población en general para la repartición de personajes, llamado al que acudieron cerca de 45 personas de todas edades.
Cabe mencionar que por ahora la prioridad es asignar los roles “con diálogo”, es decir, además de Jesús, también a María, Rey Herodes, Poncio Pilato, los apóstoles, entre otros que encarnan a los protagonistas de los principales pasajes de la Pasión de Cristo según los distintos Evangelios.
Por lo general, a ellos se suman aproximadamente 300 actores que se presentan como extras, caracterizados ya sea como gente del pueblo de Galilea, guardias, pastores, sumos sacerdotes, por mencionar algunos.
Varios de ellos llevan tambores o trompetas para lograr una mejor inmersión de la época, aspecto narrativo que le imprime mayor emoción al trayecto que en este 2024 se llevará a cabo el 29 de marzo, Viernes Santo.