Los cuatro partidos políticos nacionales de oposición que conformaron la coalición Frente Fuerza y Corazón por México pronostican un futuro sin nuevas alianzas entre ellos, con la intención de renovarse y evitar la pérdida de más votantes en las elecciones federales de 2027 y 2030.
La alianza conformada por el PRI, PAN y PRD para las elecciones federales de 2021 y 2024, podrá quedar diluida puesto que cada partido buscará su propia ruta, reorganizándose y con miras de crear nuevas fuerzas políticas.
En el caso de MC, otro partido de oposición, su dirigencia pronostica seguir creciendo por sí mismos, tal como ocurrió entre 2018 y 2024, cuando el número de votos que recibieron incrementó más de 500 por ciento.
“Hasta ahora lo veo complejo. Creo que vamos llegar a vivir un escenario en que muchas de estas fuerzas políticas que se coaligaron van a ir solas, van a buscar fortalecer sus militancias y a partir de ahí quizá quieran construir una nueva forma de participación”, pronosticó el senador por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y exjefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera.
En entrevista con El Sol de México, Mancera consideró que no habrá un PRD que compita en las elecciones federales 2027, sin embargo, confió en que “si se hicieran bien las cosas”, sí observa una nueva fuerza política emergida del PRD para 2030.
“El PRD tendrá que hacer trabajo con los partidos locales y a partir de los partidos locales, quizá convocar otra vez a la ciudadanía y buscar una conformación nacional con una nueva nomenclatura”, agregó.
Actualmente el partido del Sol Azteca se encuentra en un periodo de prevención, debido a que en los comicios del 2 de junio no alcanzó el mínimo de votos requerido por la ley electoral para subsistir como partido nacional. Por ello, el PRD, sólo conservará registro en 13 entidades y no obstante, los liderazgos del partido ya prevén la creación de una nueva fuerza política.
Con una postura coincidente Ángel Ávila Romero, representante del PRD en el INE, afirmó en entrevista que la oposición debe evitar una postura de confrontación radical con el oficialismo puesto que “el veredicto de las urnas” les hizo ver que están alejados de las personas.
“Habrá que empezar a ver cuál fue el veredicto de las urnas, entender qué es lo que está pensando la gente, creo que debemos de cambiarnos (...) hay que hacer una revisión, una autocrítica, revisar cuáles son los planteamientos que a la gente le están interesados”, dijo.
“Creo que no debiéramos repetir el mismo discurso que tuvo el PRD durante los últimos años (...) tenemos que encontrar el núcleo de personas a las que queremos llegar (...) hoy está claro que el discurso de confrontación con la 4T no dio el resultado que creíamos que la gente sentía”.
El PRI está haciendo una gran reflexión sobre la esencia del partido, sobre el nuevo rumboRubén Moreira
Además, consideró que en caso de que una nueva fuerza política emerja del PRD, “no podríamos hacer alianzas por cuestiones legales; el partido tendría que ir solo”.
Con miras a 2027 y 2030, y a diferencia de Mancera, Ángel Ávila Romero consideró que la ciudadanía tendrá las mismas alternativas como PRI, PAN y MC, mientras que el Sol Azteca tendría que definir cuál será la postura de su nueva fuerza política para participar en dichas elecciones.
Por su parte, en el partido tricolor se evidenció una fractura interna tras las elecciones. Mientras Alejandro Moreno, actual presidente del PRI, busca permanecer en la dirección del partido, otros liderazgos priistas han promovido un cambio real de dirigencia para que el partido no siga su debacle.
En un eco del discurso de Moreno Cárdenas, el coordinador de los diputados priistas en San Lázaro y exgobernador de Coahuila, Rubén Moreira dijo a este diario que el PRI está haciendo “una gran reflexión sobre la esencia del partido, sobre el nuevo rumbo”.
“Con esto vamos a enfrentar la elección del 2027 y vamos a tener buenos resultados. Nuestra dirigencia está planteando una nueva alianza con maestros, campesinos, obreros, con unas propuestas más de avanzada que las que hemos tenido y a romper con el neoliberalismo”, dijo.
“(El neoliberalismo) nos distanció mucho de muchos sectores. Pero bueno, ya vendrán tiempos mejores”.
Sin embargo, personajes como Manlio Fabio Beltrones, exgobernador de Sonora y próximo senador; y Dulce María Sauri, exgobernadora interina de Yucatán y exlideresa del PRI, han dicho a este medio que el tricolor debe tener una revolución interna para evitar desaparecer en las próximas elecciones federales.
Otro partido de la oposición que atraviesa cambios internos luego de las elecciones es Acción Nacional. El blanquiazul comenzó hace tres semanas el proceso interno para renovar su dirigencia nacional y las estatales. Personajes como Damián Zepeda, Kenia López, Jorge Romero, o Adriana Rivera, han levantado la mano para encabezar al PAN durante los siguientes años.
Militantes del blanquiazul como Ana Teresa Aranda, actual diputada federal y quien preside la comisión del PAN para renovar la dirigencia, sostienen la idea que Acción Nacional está obligado a “preservarse como una institución al alcance de los mexicanos para defender las causas ciudadanas”, acusando que los resultados electorales desfavorables fueron consecuencia de “una elección de Estado”.
“Acción Nacional ha entendido el mensaje de las urnas (...) entendemos que han cambiado las cosas en esta elección (...) Después de lo que ha pasado hay que tener grandes ejércitos que sean capaces de defender la democracia y las instituciones”.
Otros panistas de viejo cuño, como Ignacio Loyola Vera, actual diputado federal y exgobernador de Querétaro, confía en que a pesar de los desacuerdos, la renovación de la dirigencia llevará a buen rumbo al partido, por lo que en el futuro tendrá que competir como fuerza autónoma.
“El PAN tiene que ir ya solo. Las experiencias que hemos tenido, la de 2021 no fue tan mala, se hizo creer que podríamos tener mejores resultados en 2024, no fue así. Pero hoy tenemos claro que Acción Nacional vale y deberá valer mucho más por sí solo”, apuntó en entrevista con esta casa editorial.
“Creo que estamos trabajando para superar lo logrado y tenemos muy claro en qué nos hemos equivocado (...) sí tenemos claro qué tenemos que hacer, qué tenemos que cambiar para que en el 2027 podamos recuperar espacios, porque desde el 2000 hemos venido decayendo”, dijo.
“Queremos regresar a un PAN que yo conocí, al que yo me afilié en 1997 y que creo que representa a las mayorías: un PAN que defienda la vida, la libertad, que defienda la libre empresa, la iniciativa privada”, agregó.
Lejano a la alianza del PRI, PAN y PRD, pero como otro partido de oposición, Movimiento Ciudadano pretende seguir abriéndose paso en las urnas, luego de los resultados del 2 de junio. Aunque su candidato presidencial quedó en tercer lugar, el partido creció más de 500 por ciento en votos.
Somos el único partido político con futuro en este país, dentro de las oposicionesLaura Ballesteros, senadora de MC
Al conversar con El Sol de México, la senadora emecista y quien fuera coordinadora de campaña de Jorge Álvarez Máynez, Laura Ballesteros, refrendó la postura de su partido para evitar alianzas con el PRI, PAN y PRD al considerar que son las fuerzas políticas que que ya le fallaron a México.
“Somos el único partido político con futuro en este país, dentro de las oposiciones. Nosotros hicimos una apuesta muy clara desde hace ya varios años (...) que es competir solos y no solos en términos numéricos porque nos acompañan las niñas y los jóvenes de este país, sino no ir de la mano ni caminar con los partidos de siempre que ya le fallaron a México”.
“El tiempo nos dio la razón, la gente expresó en las urnas lo que ya veníamos diciendo: nadie quería votar por ellos, tenían el nivel de rechazo más alto (...) nosotros seguiremos en la misma estrategia porque la gente hoy está buscando una opción de futuro”.
“Nosotros vamos a gobernar este país en las siguientes elecciones presidenciales”, dijo confiada en que Movimiento Ciudadano tendrá una participación importante en 2030. “El 2027 es la primera gran meta a la vista”, afirmó.
En otros esfuerzos, desde organizaciones como el Frente Cívico Nacional, una de las asociaciones que encabezó la Marea Rosa, se encuentra en proceso de decidir si se convierten en un partido político, incluso con la participación de Xóchitl Gálvez, la excandidata presidencial del PRI, PAN y PRD.