En medio de la tensión por el conflicto entre agricultores y fuerzas federales en Chihuahua por el pago de agua a Estados Unidos, que ya provocó un muerto, el gobierno federal proyecta reducir más de 14 millones de pesos al presupuesto para el próximo año de la Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos (CILA), encargada de las negociaciones sobre el líquido con el país vecino del norte
De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de la Federación para 2021, entregado hace dos días al Congreso de la Unión, la CILA México tendría un presupuesto de 45 millones 217 mil 61 pesos, 14 millones 123 mil 573 pesos menos a los que ejerce en el presente año, que asciende a 59 millones 340 mil 634 pasos.
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Según información de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), la importancia de la CILA radica en que “se ha constituido en un Organismo pionero de carácter binacional, que ha asistido a ambos gobiernos en las áreas de jurisdicción que le corresponde atender a lo largo de la frontera México-Estados Unidos”
La CILA teme que el conflcto en Chihuahua impida cumplir con del Tratado sobre agua con Estados Unidos, según reveló el Director para América del Norte de la cancillería, Roberto Velasco Álvarez, aunque aseguró que hasta el momento no hay presión por parte del gobierno del presidente Donald Trump.
“No sé si llamarles presiones pero hay llamados de la Comisión Internacional de Límites y Aguas al gobierno de México para cumplir con las obligaciones internacionales contenidas en el Tratado. La comisión ha externado públicamente su preocupación respecto al cumplimiento del acuerdo”, expresó el funcionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) en conferencia.
Roberto Velasco afirmó que la Cila también ha manifestado su preocupación sobre el poco apoyo que el gobierno de Chihuahua ha otorgado a México para cumplir con el Tratado de Aguas.
De acuerdo con especialistas, como Javier Urbano, en la relación entre México y Estados Unidos el tema del agua ha sido históricamente eje central en los acercamientos bilaterales, por lo que la reducción de recursos a la CILA puede provocar que reduzca sus capacidades para enfrentar conflictos con Estados Unidos. Además, advierte, puede generar una disputa diplomática con el vecino país.
“Un deterioro de las relaciones entre Estados Unidos y México podría poner en peligro los tratados, poner más tensión en los abastos de agua y detonar condiciones de escasez con un impacto devastador sobre empleos y economía en los estados fronterizos del norte”, señala el experto consultado por El Sol de México.
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