La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) deberá garantizar justicia para las mujeres que sean víctimas de violencia de género por lo que debe haber un soporte institucional del gobierno federal, coinciden académicas especialistas en género.
Diana Fuentes, profesora de la Facultad de Filosofía y Letras, reconoció que estos cambios en la UNAM se deben a las estudiantes que han visibilizado esta problemática con sus movilizaciones por lo que la respuesta de Ciudad Universitaria (CU) tendrá que brindar los mecanismos y espacios para que la violencia contra la mujer se acabe.
En referencia al comunicado sobre que buscarán reformar sus mandatos para que la violencia de género sea considerado como causa grave de responsabilidad, entre otros 11 puntos, también es en referencia a una carta que diseñaron profesores y profesoras de la Facultad de Filosofía y Letras y que contenía una serie de demandas.
Agregó que la nueva postura de la autoridad universitaria va a contribuir en la atención a la violencia de género pero no va a ser la medida resolutoria porque el grave problema que está enfrentando la universidad es que tiene que construir los mecanismos institucionales preventivos para afrontarla.
Además, consideró que la universidad no sólo debe aplicar políticas para la prevención. “Otro reto que es enorme que para acabar con la violencia de género debe haber un soporte institucional del gobierno federal”.
Añadió: “Si la universidad por ejemplo finalmente logra tener todos los elementos para demostrar que hubo violencia de género en nuestra institución y luego eso se lleva a un ministerio público y el ministerio público no lo procesa, entonces evidentemente eso está en el terreno de la justicia”.
Aleida Hernández, especialista en género de la UNAM expuso que es necesario que se haga un llamado serio sobre las políticas que se van a implementar en la universidad y que se comunique sobre la cero tolerancia al encubrimiento de los agresores sexuales.
“Hay como dos dimensiones, una es la institucional, la normativa del cómo van abordar la violencia de género y otro es la dimensión política en donde necesitamos desde la más alta esfera de la universidad se tomen decisiones como convocar a los directores de las facultades y las directoras de los centros de investigación y también de las facultades preparatorias y todas los campos y las unidades escolares, explicó.
Cuestionó cuáles van a ser las estrategias no sólo normativa sino la estrategia política para no permitir que los directores de los planteles encubran a los agresores contra las mujeres.
“También hablan de un órgano autónomo que va atender los casos, todavía no nos dicen cómo se va integrar y cómo va funcionar: es importante que nos aclaren cómo van integrados los grupos de evaluación, y sus perfiles”, exigió.
Hernández pidió conocer cuándo se van a reformar los estatutos como el que anunciaron en el boletín sobre que será falta grave la violencia contra la mujer.
“Se necesita una estrategia muy fuerte de cero tolerancia a los agresores de las mujeres para estudiantes y profesores eso implica que nos enteremos de los casos que culminan en un resultado donde hay justicia para las estudiantes o académicas o para cualquiera que son miembros de la comunidad universitaria”, resaltó.
FILOSOFÍA SIGUE EN PARO
“Ahora que estamos juntas, ahora que si nos ven, abajo el patriarcado: se va a caer, se va a caer. ¡Arriba el feminismo! que va a vencer, que va a vencer”, corearon las alumnas de la Facultad de Filosofía y Letras ayer durante una reunión con autoridades del campus.
La Facultad convocó a las estudiantes a dialogar sobre sus propuestas sin embargo, las jóvenes denunciaron que es imposible coincidir con su postura pues han ignorado la violencia a la que se han enfrentado las mujeres universitarias.
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