La mañana del jueves fue hallado el cuerpo sin vida de un hombre, a quien maniataron y desfiguraron del rostro para posteriormente abandonar en un terreno despoblado de la comunidad Lomas del Pedregal, en Tulancingo.
Hoy se sabe, la víctima es un sacerdote, aunque no ha sido precisado el sitio donde profesaba la palabra, tampoco sus datos generales.
Tras torturarlo lo arrojaron aproximadamente tres kilómetros hacia arriba de donde se ubica el cuartel de policía de dicha demarcación, lo cual complicó la labor de peritos y policías para trasladarlo al Semefo, donde continúan las investigaciones en torno al crimen.