Un niño de dos años sufrió quemaduras de segundo grado en tórax posterior.
Un segundo bastó, para que ocurriera este accidente en la colonia Caltengo de Tulancingo.
De acuerdo con información proporcionada por socorristas de Cruz Roja quienes atendieron la emergencia, había agua hirviendo en la estufa y un solo descuido bastó para que se desparramara lesionando aproximadamente el 18 por ciento de su cuerpo.
El menor fue trasladado en ambulancia al área de urgencias del Hospital Regional de Tulancingo.
Este tipo de percances caseros, comentaron paramédicos pueden evitarse extremando medidas de seguridad, no dejar a los niños solos y no permitir que jueguen cerca de contactos eléctricos ni de una estufa.