Un botín de aproximadamente 50 mil pesos lograron amantes de lo ajeno, quienes aprovecharon la noche para aplicar el método del cristalazo y así poder abrir un vehículo estacionado en la unidad habitacional Juan C. Doria, de Pachuca.
La víctima solicitó apoyo de la policía al amanecer, cuando se disponía a partir al trabajo y se percató que su unidad tenía el vidrio trasero quebrado. Posteriormente se dio cuenta que ya no estaba en el interior una máquina empalmadora y un TDR de fibra óptica.
Los hechos ocurrieron en la calle Haciendas Santa María Tecajete y al parecer ningún vecino logró ver al o los probables delincuentes, quienes se interprete, actuaron durante la madrugada, ante la nula vigilancia.
El empleado de la empresa Esteves Jors manifestó que dejó estacionado su vehículo aproximadamente a las 21:30 horas del día anterior frente a su domicilio.
La investigación está en curso, y las autoridades exhortan a cualquier persona con información relevante a comunicarse de inmediato con las autoridades locales, en tanto se exhortó al agraviado a iniciar una denuncia ante el Ministerio Público.