Otra mujer pierde la vida por meningitis; era atendida en Torreón

A unos días de celebrarse el Día de la Madre, en la ciudad de Torreón, Coahuila, perdió la vida la joven Karen Azucena, luego de permanecer varios meses internada en la clínica 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), tras contraer meningitis micótica al dar a luz a su bebé en el Hospital del Parque.

Con apenas 21 años de edad, Karen se convierte en la víctima número 38 del brote de meningitis que se registró en cuatro hospitales particulares de la ciudad de Durango y que afectó a por lo menos 80 pacientes que recurrieron a dichos nosocomios para realizarse una intervención quirúrgica.

La muerte de esta joven se registra a casi un mes de haberse reportado el fallecimiento de María Alexa, de 19 años, quien dejó a dos niños en la orfandad, según lo dado a conocer por la Secretaría de Salud de Durango (SSD), instancia dedicada a atender la emergencia sanitaria desde que se tuvo conocimiento de los primeros casos.

Informar que a inicios del mes de noviembre del año pasado Armida Monarrez, una residente del municipio de Tepehuanes, Durango; falleció víctima de un cuadro de meningitis, su caso fue clave para conocer el virus que atacaba el cuerpo de cada vez más mujeres que llegaban a los consultorios de clínicas y hospitales públicos con síntomas como fuertes dolores de cabeza, mareos, náuseas, entre otros, que les generaban incapacidad para realizar su vida de manera normal.

Fue entonces cuando tras una revisión por parte de autoridades sanitarias federales y locale se determinó el cierre de cuatro hospitales particulares: Santé, Dickava, San Carlos y Del Parque; este último cuenta con el mayor número de pacientes que resultaron positivos a meningitis micótica, y por lo que de acuerdo a las investigación, ahí pudo haberse incubado el hongo que causó la infección.

Actualmente 10 personas se encuentran vinculados a proceso luego de ser señalados como probables responsables de dichas muertes, entre éstos se encuentran siete personas que fungían como dueños y administradores de los hospitales antes mencionados, además de un médico anestesiólogo y dos exfuncionarios públicos, quienes de acuerdo con la autoridad, incurrieron en omisiones al momento de llevar a cabo las verificaciones sanitarias.

Nota publicada en El Sol de Durango